Querida comunidad cristiana y
hermanos en el señor:
He tenido este año el honor de dar comienzo a nuestro triduo del rosario.
Creo que ha sido un año especial de FE y en esta Parroquia de Guzmán hemos
tenido experiencias buenísimas, pero también, por no llamarlas desgraciadas;
sí, que nos han tocado el alma ¿Pero? Siempre nos debemos quedar con la esencia
de todas las cosas. Que todas y cada una de ellas nos
sirvan para engrandecer nuestros corazones y acercarnos al corazón de nuestra
Madre María y así poder ver que cada uno de nosotros estamos en su interior.
Ella como madre nos pide que no tengamos
miedo y que sigamos con paso firme hacia adelante construyendo el reino de Dios
en nuestro queridísimo pueblo.
Quería daros las gracias por el apoyo que me
habéis mostrado, el cariño y la fuerza. Que nuestra Madre La Virgen Santísimas
nos guarde y guíe, junto con nuestro ángel especial llamado Teresa.
Un abrazo desde el corazón.
Isabel
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